ECOGRAFÍA OBSTÉTRICA

ECOGRAFÍA OBSTÉTRICA

martes, 26 de mayo de 2015

THE WOMEN´S WELLNESS PROGRAM (PROGRAMA DE BIENESTAR DE LAS MUJERES)




   La Menopausia es todo un reto para muchas mujeres. Supone el final de la vida reproductiva y está asociada a una serie de síntomas psicológicos, sociales y físicos. Pero además suele ser el momento en el que se ponen de manifiesto los efectos acumulados de un estilo de vida o comportamientos insanos que se unen a los propios de la edad, de  modo que los problemas de salud comienzan a hacerse presentes.
Entre las mujeres perimenopáusicas que tienen obesidad o sobrepeso, que fuman, que beben grandes cantidades de alcohol o que tienen estilos de vida sedentarios, se ha observado un riesgo incrementado de síntomas típicos de la menopausia tales como sudoración nocturna, sofocos, transtornos del sueño y cambios en la líbido. Puede ocurrir además que determinadas mujeres tengan que enfrentarse a situaciones estresantes tanto en el entorno laboral como familiar. 
   Desde esta perspectiva, se podría intentar adoptar y mantener hábitos de vida saludables, aunque esto será especialmente difícil en mujeres con ingresos escasos y en aquellas que pretenden conseguir objetivos a corto plazo.
   Las investigaciones realizadas al respecto sugieren que después de la menopausia, las mujeres que llevan una dieta acorde a los índices de "dieta de calidad", que mantienen un peso saludable y que realizan una mayor actividad física, también tienen menos riesgo de muerte por enfermedad crónica y son más sanas en general. Una de las estrategias que se proponen para conseguir estas mejoras es promover un estilo de vida específico dentro de un marco de bienestar estructurado. De hecho, algunos investigadores revelaron que las mujeres que se adaptaron a las modificaciones del estilo de vida desde una percepción de bienestar y de reducción de estrés, mostraron un mayor compromiso a la hora de intentar conseguir los objetivos de actividad física propuestos.


THE WOMEN´S WELLNESS PROGRAM (WWP)

El Programa de Bienestar de la Mujer es una página web desarrollada en Australia, que presenta un programa estructurado de promoción de la salud basado en la evidencia, de 12 semanas de duración y diseñado para que pueda ser fácilmente integrado en la vida de las mujeres de mediana edad y mayores. El objetivo principal del programa es la creación y promoción de hábitos de salud positivos de manera permanente; entre ellos el aumento de ejercicio y actividad física, una alimentación saludable, dormir mejor y un manejo del estrés adecuado.
   Este programa también ofrece a las mujeres la evidencia más reciente sobre temas de salud, tutorías personalizadas, entrenamiento y consultas de los profesionales de salud y el contacto con otras mujeres a través de las redes sociales. Aporta además la última información sobre las investigaciones relacionadas más recientes... en fin, es un programa que paso a paso, está destinado a ayudar a mujeres maduras para que consigan extraer lo mejor de ellas mismas y lo que es más importante: mantenerlo en el tiempo.
   
   En nuestra próxima entrada, mostraremos los resultados publicados en Mayo de este año en la revista Maturitas, obtenidos tras la aplicación de este programa a 225 mujeres australianas de entre 40 a 65 años.


















martes, 12 de mayo de 2015

VACUNAS FRENTE AL HPV: RESULTADOS DESPUÉS DE 7 AÑOS


A primeros de este mes, la revista The Lancet Infectious Diseases ha publicado los resultados de una revisión sistemática y meta-análisis, evaluando los efectos sobre la población de los programas de vacunación frente al HPV hasta el momento actual.
Estos programas de vacunación frente al HPV se pusieron en marcha en algunos países durante el año 2007, una vez se obtuvieron las licencias. Los ensayos clínicos habían ya demostrado que estas vacunas tienen más del 90% de eficacia, en la prevención de lesiones cervicales de alto grado causadas por los serotipos 16 y 18 del virus del papiloma humano, que son responsables del 70-80% de los cánceres cervicales y de una gran cantidad de cánceres anogenitales y orofaríngeos. Es más, mostraron también una eficacia sustancial, aunque menor, frente a otros serotipos que también son oncogénicos, es decir, responsables de cáncer.
Los hallazgos más importantes de este estudio fueron la disminución de las infecciones por los serotipos 16 y 18 del HPV y verrugas anogenitales en más del 60% en chicas (menores de 20 años) cuando la vacunación femenina fue elevada (por encima del 50% de la población). Pero no solo eso, los autores también publicaron reducciones significativas en infecciones por los serotipos 31, 33 y 45 en el mismo grupo de chicas, así como en verrugas anogenitales en chicos menores de 20 años y en mujeres de 20 a 39 años de edad. Ello quiere decir que existe una evidencia clara de protección cruzada e influencia medioambiental. En aquellos países donde la tasa de vacunación fue inferior al 50% también ocurrió lo mismo, tanto en mujeres como en chicas jóvenes, aunque no se observaron ni la protección cruzada frente a otros serotipos ni la influencia medioambiental.
Sin embargo, hay que tener en cuenta, que algunos estudios incluidos en este meta-análisis eran clínicos y no estaban basados en la población (otros si lo estaban), por ello pueden carecer de representatividad. Por otro lado, estos programas de vacunación fueron desarrollados en países ricos como Australia, Nueva Zelanda o el Reino Unido, en muchos casos, programas de vacunación escolares, donde se vacunó masivamente a una gran parte de jóvenes. Esto significa que no se sabe nada al respecto en países pobres, en los que además, la carga de morbilidad asociada al HPV es la más alta.
En cualquier caso, estos resultados son muy esperanzadores, pero habrá que adjudicar una atención especial a vigilar de forma continua los programas de vacunación, para observar la tendencia y efectos sobre las enfermedades asociadas al HPV, especialmente la incidencia de cáncer a largo plazo y por supuesto, mejorar dichos programas si fuera necesario.